Ecologistas se oponen a la llegada de cruceros en Baja California

Ayer zarpó el último de cinco cruceros que desde febrero estuvieron fondeados enfrente de la bahía de Pichilingue, muy cerca de La Paz, un hecho que ha generado una discusión entre la sociedad civil cuando sólo debería ser motivo de orgullo para Baja California Sur.

La razón por la que estuvieron allí esos barcos inició con los llamados desembarcos humanitarios que se llevaron a cabo en puertos mexicanos y que permitieron a diversas tripulaciones abordar aviones y salir rumbo a sus casas después de que la mayoría de los países del mundo le cerraron esa posibilidad por la pandemia del covid-19.

La ya de por sí buena relación con las asociaciones de cruceros se fortaleció debido a este hecho y fue así como los cinco barcos mencionados estuvieron frente de Pichilingue debido a que sus aguas generalmente tranquilas resultaron un refugio atractivo.

Sin embargo, es conocida la presencia de varios grupos ecologistas en La Paz, que comenzaron a generar un ambiente de animadversión en contra de los cruceros argumentando que contaminaban las aguas, pues depositan allí basura y sustancias tóxicas.

Aunque circularon algunos videos al respecto, los ecologistas jamás pudieron demostrarlo y los cruceros tienen no sólo una serie de mecanismos para evitar contaminar los mares, sino que en caso de que se demuestre haberlo hecho son objeto de penalizaciones extraordinariamente elevadas que las navieras buscan evitar a toda costa.

Hoy estos cinco cruceros se están reincorporando a sus actividades; una situación que ocurre coincidentemente con un momento en que el gobierno de Baja California Sur licitó un nuevo muelle de cruceros para operar en La Paz.

El ganador de la licitación fue Isaac Hamui, empresario qué fundó y opera el puerto de cruceros de Mahahual, que es el segundo en importancia en Quintana Roo después de Cozumel.

Los planes de esa compañía son terminar de aquí a octubre con la obtención de los permisos para iniciar las obras de acondicionamiento del nuevo muelle de cruceros a partir de ese momento con para recibir barcos, incluso en la temporada alta de invierno.

En una primera etapa se espera que el nuevo muelle de cruceros de La Paz reciba uno 60 barcos al año contra los apenas 15 que llegaban antes de la pandemia.

Sin embargo, hoy existe un fuerte activismo en los medios y en las redes sociales por parte de los ya referidos grupos ambientalistas, que tratan de evitar la llegada de estos cruceros que, básicamente, significarían más riqueza y desarrollo para la capital del estado.

Una inquietud que ha surgido es cuál será la posición del gobernador electo de Baja California Sur, Víctor Castro y, ésa es una de las razones que explican la visita que hará la próxima semana a La Paz Michelle Page, CEO de la Asociación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA, en inglés).

Ambos gobernadores electos salidos de las filas de Morena se reunieron hace unos días con Alfonso Durazo, el gobernador electo de Sonora y los tres acordaron apoyar el negocio de los cruceros en el Mar de Cortés.

La semana que viene será muy importante, para visualizar el futuro de los cruceros en esta región del país.

Fuente: Dinero en Imagen por Carlos Velasquez

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