El turista Argentino de alta gama re descubrió la cordillera

Entre las transformaciones más visibles que generó la pandemia de coronavirus en el mercado turístico local se destaca la irrupción de un público de alto poder de gasto, que no solía elegir a Bariloche en verano, pero que esta vez se volcó en gran número al turismo interno y los destinos de cordillera. 

Se trata en general de grupos familiares chicos, también jóvenes en pareja, que viajan con vehículo propio, se alojan en hotelería de cuatro y cinco estrellas y contratan excursiones y servicios de “alta gama”, cuyos prestadores disfrutan de una temporada superior al promedio.

Otra forma de alojamiento que agotó su oferta con anticipación fueron las casas “top” con costa de lago o en barrios cerrados como Arelauquen, a valores inalcanzables para la clase media.

El panorama de la actividad turística, que atravesó varios meses de oscuridad durante la cuarentena estricta, empezó a abrirse el pasado 4 de diciembre y tomó envión con el correr de las semanas, hasta alcanzar un nivel de ocupación que superó los vaticinios más optimistas.

La directora comercial del hotel Llao Llao y directiva de la Asociación de Hoteles de Turismo (AHT), Daina Smud, dijo que este verano trabajaron casi en un 100% con turismo nacional; un dato que no tiene antecedentes en ese establecimiento.

Se potenció el turismo de alta gama. Es gente acostumbrada a viajar al exterior en “all inclusive”, donde tienen todo en el hotel. Pero acá eso no existe, y se adaptaron”.

“En verano siempre tuvimos como máximo entre 45 y 55% de argentinos y el resto, pasajeros del exterior. Pero esta vez no fue así y nos obligó a cambiar el eje tanto en lo comercial y promocional”, aseguró.

Dijo que el público se reconvirtió, lo mismo que las modalidades de consumo. Por ejemplo en el Llao Llao se registró un alto porcentaje de estadías largas, de hasta diez días “y algunos pasajeros que se quedaron tres semanas”, cuando hasta el año pasado el promedio rondaba entre los 3,5 y los 5 días.

De alguna forma, se trata de un público acostumbrado a tomar vacaciones largas, en playas marítimas, por lo general en residencias propias, que esta vez cambiaron por un destino patagónico, pero con los hábitos que solían desarrollar en Punta del Este, Estados Unidos u otros destinos del exterior.

Smud dijo que en enero trabajaron con unas 300 personas por día y un factor de ocupación del 80% de la capacidad disponible, que el hotel redujo respecto de lo habitual porque está en un plan de remodelación.

Explicó también que para febrero el nivel de reservas repuntó mucho, incluso para después de los feriados de Carnaval, que se mantenían un poco “frío” hasta el mes pasado.

“Lo que sí se ve es que la gente está atenta a la cuestión sanitaria y toma la decisión muy sobre la fecha, con dos o tres días de anticipación. Esto tampoco se veía”, aseguró.

Dijo que el público nacional ABC1 que viene a Bariloche “en su enorme mayoría “se va conforme”, porque ven a la ciudad “bonita y organizada, al menos en lo que le toca vivenciar al turista”.

La AHT agrupa a los hoteles y apart de 4 y 5 estrellas, entre los que figuran Llao Llao resort, NH Edelweiss, Alma del Lago, Nahuel Huapi, Inacayal, Villa Belluno, Charming, El Casco, Panamericano, Huinid, Nido del Cóndor Gran Hotel Catedral, entre otros. Lago dijo que en total ofrecen unas 4.500 plazas, de las 31.000 con que cuenta Bariloche.

Dijo que Bariloche no improvisa en ese segmento y “tiene variedad de productos para ofrecer”, lo cual “sorprendió a muchos”.

Consultado por algún punto en contra que hayan señalado esos turistas, Burlón dijo que “no hubo quejas registradas en la secretaría. Sí tal vez los robos en autos de alquiler y en algunas cabañas, pero es algo que puede pasar en cualquier destino”.

Burlón subrayó que el flujo general de turistas fue mayor a lo esperado y que en la primera semana de febrero la ciudad recibió a 41.000 visitantes, según el registro de permisos obligatorios que emite la provincia. Durante enero fueron 60 mil en la primera quincena y 55.000 en la segunda.

La ministra de Turismo de Río Negro, Martha Vélez, señaló que el nivel de gasto promedio en Bariloche es de 5.700 pesos/día, cuando en El Bolsón y Las Grutas ronda la mitad. Otro indicio claro del tipo de público que logró captar la ciudad lacustre.

Ese número se duplica con facilidad (unos 10.000 pesos) en el caso del público que se aloja en 4 y 5 estrellas. Dijo que al momento de definir la esperada apertura de diciembre proyectaron alcanzar una ocupación de entre el 40 y 50% de las plazas ofrecidas, pero el promedio en la ciudad fue del 60% en la primera mitad de enero y del 55% en la restante.

Según describió, “hay mucho turismo de la ciudad de Buenos Aires y provincia de Buenos Aires, de Mendoza, de Chubut y del Alto Valle”, con un aumento proporcional del viajero de alto poder de compra. “Se ve por la ocupación en 4 y 5 estrellas”, afirmó.


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